Si, aún te amo, y aun me dueles cada despertar, no sólo en
la mañana, la agonía de tu ausencia se prolonga más de lo que me gustaría
reconocer. Sé que intento ser fuerte, sé que puedo ser fuerte, pero sabes como
odio tapar el sol con un dedo y fingir bienestar. Dicen que la esperanza es lo
último que se pierde y por algún estúpido motivo más allá de mi consciencia
racional y mi descompensación física, aún creo en ti, aún creo en tus palabras
y en la verdadera existencia del sentimiento que las creo. Te extraño, te
extraño como nunca en mi vida, como nunca lo quise reconocer; muerto todo no
queda más que aceptar: te amo, y siempre preferiré estar contigo a cualquier
cosa en el mundo, no importa que haya pasado, no importa el pasado, ni este
presente que te aleja de nuestro tiempo. La última noche que pasé junto a ti lo
descubrí, no hay nadie más con quien quiera estar, eres el deseo del deseo, mi insaciable
sed de existir, no importa el tiempo, la distancia y las negativas, no importan
las circunstancias ni las palabras dichas o no dichas. Te sigo esperando tras
el arco del destino, sigo buscándote en el todo indivisible e insoluto de la
embriaguez y la luz, busco el sosiego en el caos onírico que trae tu esencia a
mi, busco la paz que me da tu voz, o simplemente tu cercanía y los latidos de
tu corazón, busco tu serenidad y espero ser una con ella, no ausencia, te busco
a ti y a tu aroma, tu fuerza y delicadeza, tu potencia, te busco a ti y siempre
lo haré, a pesar de… te amo infinitamente, aunque sé que tal vez sea estúpido y
que por más que lo desee, para ti no queda nada y ya no hay vuelta atrás, te
amo y creo en tí aun cuando después una enorme esfuerzo y 2 años de mantener la
esperanza firme a punta de fantasmas y lagunas, me dejaste claro que ya no puedo
creer en nuestros planes. Te amo y soy consciente que eres tu, eres el amor de
mi vida y siempre volveré a ti, siempre te preferiré a ti, te elegiré a ti, y
aunque desee engañarme fingiendo que no es así, en el fondo lo sé, eres tú,
siempre será tu, aunque me haga mil programaciones neurolingüísticas para no
recordar tu nombre, aunque le apueste al solipsismo y te excluya de mi universo
transformado, siempre serás tu, aunque te llevaste las ganas y solo me dejaste
la inercia… te amo infinitamente, y como te dije la primera vez, TE AMARÉ,
HASTA QUE LA ÚLTIMA ESTRELLA SEA POLVO….
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