You're like a cute pair of shoes that I really want but don't quite fit right...

El otro día leí esa frase... y realmente eres como ellos...

Tu eres como un hermoso par de zapatos que no quiero ver en los pies de otra, que quiero tener siempre en mis pies, así me pelen y me saquen ampollas; que quiero usar así me lastimen, así sólo piense en la hora en que por fin pueda descansar de tanta molestia por nada. Que quiero que sean mios, así sólo pueda tenerlos dentro de una cajita de adorno, la que levantaré cuando quiera darme una alegría vacía, los miraré y sólo para saber que son mios, inútilmente míos.

...Pero sabes qué, ya no me molesta no tenerte, no me molesta verte en los pies de otra, y ahora lo sé, ella anhela ser yo y estar en mis zapatos, por eso no le queda más que disfrazarse para tratar de parecerse un poco, pero los besos robados saben amargos, tu podrás fingir que soy yo quien te usa, ¿pero te sabrá verdadero?.

No te amarraré con cordones, ni pondré plantillas para que te ajustes, ni le añadiré un hueco de más para que encaje, no caminaré sexy porque miras bajo mi falda, ni te ataré a mis tobillos como sandalias romanas.

Ésta vez no dejaré crecer mis uñas ni para llenar el espacio que nos separa ni para aferrarme a tí con ellas ni para impregnar de color tu inexpresiva mirada monocromática, ni para colorear el camino con cada paso que damos. Tampoco usaré cremas para suavizar nuestro trato, ni talco para absorber la humedad que cada que tu frío cuero toca mi piel, me provocas, ni recurriré a las tácticas de las hermanastras, hay agua de sobra.

Ésta vez, no me pondré curitas en los talones, ya comprobé que es inútil, tan inútil, como sobre un corazón partido. No serás mi punto de equilibrio, ni mi protección en el camino. Realmente te quiero, pero no puedo seguir haciéndome daño, por más que quiera no podrás levar me en el viento hacia un mundo onírico, ni ser las botas escarlata que me acompañen en mi camino amarillo.